lunes, 9 de julio de 2012

Mercedes Sosa, La Voz de América


Mercedes Sosa nació en San Miguel de Tucumán, Argentina, el 9 de julio de 1935.

Ya desde adolescente su gusto por el folclore se plasmaba en sus actividades, enseñando danzas folclóricas y dando sus primeros pasos en la canción. 

En la década de los 60s, Mercedes Sosa perteneció al Movimiento del Nuevo Cancionero, una corriente renovadora del folclore que proponía dejar de lado modas pasajeras y centrarse en la vida cotidiana de los argentinos. Junto con su marido Manuel Oscar Matus cantaban en la Universidad y en varios pequeños escenarios que comenzaron a recibirla con entusiasmo. En 1965, participó del Festival Nacional de Folklore de Cosquín, que marca el nacimiento de la gran artista popular, idolatrada en Argentina y ovacionada internacionalmente. Fueron años muy fecundos, en los que La Negra grabó varios discos e hizo presentaciones no sólo en Argentina sino también en diversos países de América Latina, en Estados Unidos y Europa.

En 1972 se editó “Hasta la victoria” un disco cuyas canciones tenían un claro contenido social y político. Mercedes Sosa mantuvo siempre su compromiso por una sociedad más justa e igualitaria. En los años 70, continuó grabando discos en los que rescataba lo mejor de la cultura latinoamericana. En 1979, fue detenida en la ciudad de La Plata junto con todo el público que la había ido a escuchar. La prohibición de que cantara, más el hostigamiento permanente la empujaron al exilio. Ese año se instaló en París y en 1980 se radicó en Madrid.

En 1982 regresó a Argentina donde dio una docena de conciertos en el Teatro Opera de Buenos Aires. Allí la vieron miles de jóvenes por primera vez, que junto a sus seguidores de siempre, la acogieron nuevamente como un ícono de la canción nacional. Al año siguiente regresó definitivamente a la Argentina. Por esos años grabó canciones de y con músicos como León Gieco, Charly García, Fito Páez, Silvio Rodríguez, por mencionar algunos, y continuó con sus giras internacionales. En 1988 se editó “Amigos míos”, un disco compilado de Mercedes Sosa cantando con Milton Nascimento, Pablo Milanés, Teresa Parodi, Charly García, Fito Páez y Raimundo Fagner, entre otros. A fines de julio de 1989, La Negra recibió la medalla de la Orden del Comendador de las Artes y las Letras, otorgado por el Ministerio de Cultura de la República Francesa.

Los años 90 fueron muy importantes. Sosa volvió a cantar en un estadio abierto, acompañada de grandes músicos argentinos, participó del Festival de la Canción de Viña del Mar en Chile y fue parte del concierto de navidad realizado en el Vaticano. El 1 de abril de 1992 fue declarada Ciudadana Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires. En 1993 se editó una compilación que reunió veinte temas grabados en diversas épocas, llamado “Mercedes Sosa, 30 años” y en 1995 se realizó un homenaje a la cantautora titulado “Maestros del Alma”. Ese mismo año se editó el disco “Mercedes Sosa – Oro”, con sus grandes éxitos. En 1997 participó de la Cumbre Internacional Río+5, donde intervino en la redacción de la “Carta de la Tierra” como vicepresidenta del Consejo de la Tierra en representación de América Latina. Pocos meses más tarde saldría a la venta “Alta Fidelidad. Mercedes Sosa canta a Charly García”, un hito en la discografía de ambos músicos.

Mercedes Sosa fue declarada Ciudadana ilustre de Tucumán, recibió la Orden del Mérito de la República Federal de Alemania; la Medalla al Mérito Cultural del Ecuador; la Placa de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Perú, premios de la UNESCO y UNIFEM, entre otros reconocimientos. Participó en la colección discográfica “Global Divas”, auspiciada por la ONU, que incluye su tema “Gracias a la vida”.

En el año 2000, Mercedes Sosa concluye la grabación de la Misa Criolla, obra cumbre del folclore argentino, un proyecto largamente anhelado que fue excelentemente recibido por la crítica y el público. Con él cosechó el Grammy Latino a la mejor interpretación de una obra musical. La Negra, logra en este trabajo una profundidad y belleza muy singular. Dos años más tarde comienza una gira con Víctor Heredia y León Gieco llamada “Argentina quiere cantar”, que se interrumpe momentáneamente por problemas de salud de la cantautora (que padeció durante más de 30 años el mal de Chagas-Mazza, una enfermedad endémica de Sudamérica ligada a la pobreza rural), pero que se retoma al siguiente año. En 2005 vuelve a los escenarios intentando superar algunas adversidades de salud y lanza su última producción discográfica “Corazón libre”. Continúa los siguientes 3 años, como a lo largo de toda su carrera, con sus giras internacionales por América y Europa.

El 4 de octubre de 2009 Mercedes Sosa fallece en Buenos Aires debido a una disfunción renal que derivó en una falla cardiorespiratoria. Fue velada en el Salón de los Pasos Perdidos del Congreso Nacional de la Argentina, donde miles de personas se acercaron a despedirla, incluyendo a dignatarios de toda la región Latinoamericana. Sus restos fueron cremados para, de acuerdo a su deseo, repartir sus cenizas en sus tres lugares amados: Tucumán, Mendoza y Buenos Aires.

Mercedes Sosa, La voz de América, transcendió los límites del folclore alcanzando la admiración de diversos públicos. Con su profunda voz, sus letras con contenido social, su innovación siempre fiel a sus raíces, y su personalidad carismática, La Negra dejó una huella imborrable en América Latina y el mundo.

jueves, 21 de junio de 2012

México 2012: a 10 días de las elecciones presidenciales


Fernanda Hopenhaym*

Este es un período crucial para la joven vida democrática mexicana. Son las terceras elecciones presidenciales desde que, en el año 2000, ganara la alternancia luego de 70 años de gobiernos del Partido de la Revolución Institucional (PRI). 

Nos encontramos frente a un panorama complejo, con múltiples variables en juego difíciles de desentrañar hasta para los más finos analistas. De los cuatro candidatos presidenciales, tres representan las fuerzas políticas más grandes del país y uno (Gabriel Quadri de Nueva Alianza) se erige en nombre de un pequeño partido que tiene sin embargo por detrás un sector de gran relevancia por su capacidad de influir en la política mexicana, como es el sindicato de maestros encabezado por Elba Esther Gordillo. Por primera vez hay una mujer en la contienda, la representante del Partido Acción Nacional (PAN), actualmente en el gobierno, Josefina Vázquez Mota. Ésta se disputa el segundo lugar en las encuestas con Andrés Manuel López Obrador, abanderado de las izquierdas, quien fuera Jefe de Gobierno del Distrito Federal del 20o0 al 2005, cuando renunció al cargo para constituirse en candidato presidencial en las elecciones de 2006, cuyos resultados impugnó prolongadamente. Quien lleva la delantera según las encuestas es Enrique Peña Nieto, el candidato del PRI, ex gobernador del Estado de México y personaje polémico por su vinculación con algunos de los políticos más cuestionados del país.

¿Qué representa cada uno de ellos? 

De manera curiosa, Josefina Vázquez Mota, del partido oficialista y ex funcionaria tanto de la administración actual (como secretaria de Educación) como del gabinete anterior (como secretaria de Desarrollo Social), se presenta a sí misma como una opción distinta, portadora de cambios beneficiosos para el país, como si su partido no tuviera que ver con la situación que vive el México de hoy. Abunda asimismo en la utilización de su ser mujer y madre para ganar simpatías y mostrarse diferente. Siendo una economista preparada, con experiencia en el poder ejecutivo así como en el legislativo, no ha logrado avanzar en las encuestas. Se encuentra además en una situación muy particular respecto de sus correligionarios, cuando el ex presidente Vicente Fox (PAN, 2000-2006) apoya abiertamente al candidato del PRI y el actual presidente Felipe Calderón (PAN, 2000-2012) demostró en su momento una contundente preferencia por otro de los pre-candidatos dentro de la contienda interna de su partido. Es como si Josefina, como la llaman en todos los medios, estuviera dando pelea no solamente con los presidenciables sino también con sus colegas del Partido Acción Nacional.

Por su parte, Andrés Manuel López Obrador, el candidato de las izquierdas unidas bajo el lema de Movimiento Progresista (con el Partido de la Revolución Democrática-PRD como principal fuerza), ha sido un personaje que despierta pasiones encontradas. Luego de su derrota en 2006, de la que aún hoy se cuestiona en algunos sectores la existencia o no de fraude electoral, AMLO perdió popularidad entre muchos de los votantes, y hoy en día se encuentra segundo o tercero dependiendo de qué encuestadora se trate. Si bien cambió su discurso combativo por un lenguaje de reconciliación y se presenta a sí mismo como la única opción para lograr un cambio verdadero en el país, no ha logrado convencer a las masas. Se ha visto de alguna forma beneficiado por el movimiento #yosoy132, compuesto de estudiantes universitarios de todo el país, nacido en rechazo a la presencia del candidato del PRI en la Universidad Iberoamericana y a las posteriores acusaciones por parte de ese partido de que no se trataba de estudiantes genuinos sino de “acarreados” del PRD, y que exige la democratización de los medios y la difusión amplia de información para unas elecciones más transparentes. Sin embargo, quizás haya desaprovechado la oportunidad de montarse a ese caballo y cabalgar con los jóvenes hacia el triunfo el próximo 1 de julio. Parece que se ha perdido el impulso que lo acercó a Peña Nieto en algunas de las encuestas durante un par de semanas, a pesar de que ha presentado un potencial gabinete con algunos de los mejores talentos de México.

La historia de Peña Nieto es también particular. En su administración en el Estado de México los feminicidios y otras formas de violencia aumentaron, así como la pobreza extrema, y no obstante el PRI aplastó estrepitosamente a los otros partidos en las elecciones estatales ganando nuevamente la gubernatura. Se le ha visto cercano a ex líderes como Carlos Salinas de Gortari (sospechado de fraude electoral en 1988 donde ganó la presidencia de la República, entre otros delitos) y Arturo Montiel (ex gobernador del Estado de México y acusado de enriquecimiento ilícito y corrupción). ¿De dónde proviene su popularidad entonces, que lo coloca al frente de esta carrera electoral de manera tan contundente? Hay varias hipótesis. Por un lado, lo que algunos analistas han llamado “la trampa de la nostalgia”, que lleva a los electores a añorar los tiempos en que el PRI gobernaba el país dada la situación de violencia e inseguridad que experimentamos hoy, sin valorar otros aspectos negativos de las administraciones priistas, como la corrupción y el autoritarismo, por ejemplificar. Es además un hombre joven, ambicioso, casado con una actriz de telenovelas (cuya boda de cuento de hadas fue seguida de cerca por muchísimos mexicanos), que representa de alguna manera los intereses de la clase media aspiracional, que es bastante popular entre los sectores menos educados y que parece dar tranquilidad a quienes tienen mayores privilegios. 

Así las cosas, hay otros factores que complejizan aún más el panorama. La fiabilidad de las encuestas se ha puesto en cuestión ya que se han presentado resultados sumamente divergentes entre una y otra empresa encuestadora, lo cual ha hecho sospechar a más de uno de que se ven influenciadas por intereses políticos particulares. Al mismo tiempo, hemos sido testigos de dos debates oficiales organizados por el Instituto Federal Electoral que, si bien con algunas diferencias entre el primero y el segundo, tuvieron formatos rígidos que limitaron la capacidad de los candidatos de ahondar en sus propuestas y de realmente debatir entre sí. En muchas ocasiones se aprovechó los escasos minutos para descalificar a los otros contendientes. La transmisión del primer debate, además, fue voluntaria, lo que llevó a alguno de los medios con más alcance a optar por poner al aire otros programas. El segundo debate oficial fue transmitido en cadena nacional, en gran parte como consecuencia de la presión ejercida por los estudiantes del #yosoy132, quienes además organizaran en días recientes un debate no oficial al que asistieron todos los candidatos excepto Enrique Peña Nieto. Allí, el formato permitió mayor fluidez y la incorporación de preguntas específicas por parte de un importante número internautas, que fueran recogidas por los organizadores. Sin embargo ninguna televisora trasmitió este evento, la señal de internet se saturó por el gran interés despertado en el público, y solamente algunas estaciones de radio lo pusieron a disposición de sus escuchas. De cualquier forma fue un momento importante en la vida democrática del país siendo la primera vez que se concretó una iniciativa ciudadana de este tipo. 

¿Qué esperar el 1 de julio entonces? Si bien la tendencia ventajosa del candidato priista pareciera no tener marcha atrás, la contienda no está cerrada aún. Si consideramos los cuestionamientos a las encuestas y las proclamas de uno u otro candidato/a sobre sus avances, además de toda la complejidad del paisaje electoral, las posibilidades todavía están abiertas. Lo más importante será, como ciudadanos, vigilar que las elecciones sean limpias, salir a votar, y continuar apoyando las acciones que fortalezcan la joven democracia en México.


*Fernanda Hopenhaym es Licenciada en Sociología por la Universidad Católica del Uruguay. Egresada de la Maestría en Estudios Latinoamericanos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Investigadora y consultora.

jueves, 8 de marzo de 2012

Día Internacional de la Mujer: ¿qué se conmemora realmente?


Fernanda Hopenhaym

Si me felicitas es que no entendiste nada” reza una de las frases más populares compartidas por las feministas o activistas sociales en twitter en español el día de hoy. El Día Internacional de la Mujer no es, como muchos han interpretado, un día simplemente para la celebración de las mujeres, tal como lo puede ser el día de la madre, día del padre o día del niño. Este mal entendido es, quizás, lo que ha llevado a muchas personas a cuestionar la no existencia de un día para los hombres.

Es necesario, entonces, remitirnos a los orígenes de esta conmemoración. Desde finales del siglo XIX y durante las primeras décadas del siglo XX, la llamada segunda ola del feminismo jugó un rol fundamental en movilizar a las mujeres alrededor de causas comunes. Las sufragistas, que perseguían la obtención de derechos políticos igualitarios para las mujeres, fueron las más conocidas, particularmente por sus movilizaciones callejeras. Sin embargo hubo otros grupos, por ejemplo las mujeres trabajadoras o las mujeres socialistas, que abogaban por una ampliación de sus de derechos laborales, así como por un cambio más global en sus sociedades. En este contexto, surge el Día Internacional de la Mujer, convocado por primera vez en 1911 como Día Internacional de la Mujer Trabajadora. Como antecedentes, en febrero de 1909 en Estados Unidos se celebró el primer Día de las Mujeres Socialistas y en 1910 se decidió, en el marco de la Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas, que al año siguiente se celebraría el primer Día Internacional de la Mujer Trabajadora, con el fin de reivindicar la igualdad de derechos entre hombres y mujeres.

Aquella primera convocatoria de 1911 tuvo lugar en Alemania, Austria, Dinamarca y Suiza simultáneamente. Las numerosas participantes exigieron para las mujeres el derecho al voto y a ocupar cargos públicos, el derecho al trabajo, a la formación profesional y a la no discriminación laboral. A partir de aquel año esta conmemoración se expandió a muchos lugares del mundo. Finalmente en 1977 la Asamblea General de Naciones Unidas proclamó el 8 de marzo como Día Internacional por los Derechos de la Mujer y la Paz Internacional.

¿Por qué el 8 de marzo? En 1917, año de la Revolución Rusa, entre el 23 de febrero y el 8 de marzo se llevaron a cabo manifestaciones en el contexto del Día Internacional de la Mujer Trabajadora, que desencadenaron una serie de protestas contra la monarquía imperante y la opresión que ésta ejercía. Sin programarlo, estos eventos “espontáneos” jugaron un rol fundamental en la revolución que seguiría. Por lo tanto, después del establecimiento del nuevo régimen, las feministas rusas lograron que el 8 de marzo se instituyera en una fiesta oficial en la Unión Soviética. De allí se expandió el uso de esa precisa fecha para esta conmemoración, finalmente tomándose como el Día Internacional que hoy conocemos.

La pregunta que seguiría entonces es: ¿cuál es la trascendencia de este día? El Día Internacional de la Mujer nos brinda un espacio, una vez al año, para detenernos a reflexionar y actuar sobre la situación de la mitad de la población mundial. Aunque en variados contextos, y sin obviar las diferencias de clase, grupos étnicos, orientaciones sexuales y demás características que nos ponen en posiciones distintas (de mayor o menor privilegio) dentro del sistema imperante, aún hoy todas las mujeres experimentamos algún tipo de discriminación. Fenómenos como la feminización de la pobreza, la persistente violencia de género, la brecha salarial, el aumento de la incidencia del VIH entre mujeres, la escasa participación en la política y en las esferas de poder, entre otros, dan cuenta de lo mencionado. Se calcula que las mujeres poseen el 1% de la propiedad del mundo y reciben el 10% de los ingresos mundiales. En México, por poner un caso, 7 de cada 10 mujeres han experimentado algún tipo de violencia física y/o psicológica.  Y estos son solamente algunos ejemplos.

Por lo tanto, la relevancia del Día Internacional de la Mujer transciende por mucho la mera “celebración” del ser mujer. Cada 8 de marzo, en resumidas cuentas,  conmemoramos la lucha de las mujeres por participar de forma igualitaria en la sociedad, por obtener y disfrutar en pleno nuestros derechos, por tener una vida sin violencia y poder desarrollarnos de manera íntegra como personas. Y recordamos que aún, como sociedades, nos queda mucho camino por recorrer hacia la igualdad.




Fernanda Hopenhaym es Licenciada en Sociología por la Universidad Católica del Uruguay. Egresada de la Maestría en Estudios Latinoamericanos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Investigadora y consultora. Activista feminista.


jueves, 16 de febrero de 2012

La reina de la "morna"

León Rosa*


Cesaria Evora, “la reina de la `morna´”, falleció el pasado 17 de diciembre en su Sao Vicente natal, a los 70 años de edad. El mundo entero despide con cariño, respeto y admiración a “La diva de los pies descalzos”, una de las estrellas más rutilantes de la World music, y una artista que desde Europa consiguió mostrarle al mundo entero de qué se trata la ‘morna’ y la música de Cabo Verde. 

Hace aproximadamente diez años, un domingo por la noche hurgando entre los canales de cable encontré de casualidad un recital en vivo de una artista que cantaba en portugués, de voz áspera y dulce a la vez,  y que transmitía una profundidad inconmensurable al cantar. Se trataba de una señora de edad madura ya, que encantaba a la audiencia de ese teatro; en la sala no se oía el zumbido de un insecto mientras ella cantaba. Los rostros del público eran de deleite y fascinación absoluta, de encantamiento.

Yo también quedé encantado y fascinado por esa mujer y su voz, y esperé a que terminara el tema para que el graph al pie de la imagen me informara el nombre de la cantante y el tema. Por suerte no se trataba de un clip aislado en el contexto de una programación variada, sino que era un concierto completo de Cesaria Evora, la artista más importante y representativa que jamás haya salido del archipiélago africano de Cabo Verde, frente a las costas de Senegal.

Instantáneamente, corrí a mi computadora, busqué información y ordené por Internet el último disco de Cesaria, dado que sabía iba a ser difícil encontrarlo –al menos por algún tiempo- en las casas de discos de Montevideo. Por suerte, la librería online más grande del mundo hizo bien su trabajo, y en cuestión de días ese disco estaba en mi casa y yo dispuesto a disfrutarlo, con volumen y auriculares.

Su música era difícil de describir en términos estilísticos. Tenía que ver con el folklore, con lo tradicional, guitarras, acordeón, elementos de percusión, pero me resultaba difícil identificar ese sonido con un ritmo específico. Leyendo un poco más acerca de esta artista y la cultura de Cabo Verde, pude entender que ese sonido, ese ritmo tan característico de Cesaria y su grupo, se llamaba “Morna” y es el ritmo más típico de la música de aquel país.

La morna es “… un género de música de Cabo Verde relacionado con el fado portugués, la modinha brasileña, el tango argentino y el lamento angoleño. Las composiciones se cantan, por regla general, en el idioma criollo de Cabo Verde y entre los instrumentos se suele utilizar el cavaquinho, clarinete, acordeón, violín, piano y guitarra” (Wikipedia)

Oficialmente, existen diez discos originales editados por Evora, entre los años 1988 y 2010. Su primer álbum fue “La diva aux pieds nus” (1988), grabado en París, donde la cantante apodada la diva de los pies desnudos vivió por algunos años y desde donde disparó su carrera al resto del mundo, logrando el reconocimiento mundial a la edad de 47 años. Su último disco fue editado en 2010 (“Cesaria Evora &…”), y existe un DVD registrado en vivo en Paris (“Live in Paris 2001”).

La diva de los pies desnudos falleció el pasado 17 de diciembre en su Sao Vicente natal, a los 70 años. Será siempre recordada por los amantes de la música y el arte como “la reina de la morna” y la profundidad, sensibilidad y dulzura expresada en su voz y sus canciones vivirán por siempre en sus discos, y en nosotros.
 

Para ver, escuchar, sentir
Cesaria Evora – Saia Travada

Más información
Cesaria Evora – Sitio Oficial

Referencias
Wikipedia – Online (fecha de acceso 22 de diciembre 2011)  http://es.wikipedia.org/wiki/Morna


*León Rosa es músico y docente. Desde el año 2004 es compositor y cantante de la Banda El Mago. Editó un disco en Uruguay en el 2006. Radica en Buenos Aires, manteniendo una sostenida actividad musical al frente de El Mago.


*

miércoles, 26 de octubre de 2011

Chiapas

Linda Bucay

La caricia breve de un recuerdo
se acurruca tras los ojos
mostrándose como un sueño,
como un instante de luz despoblada,
como un tiempo ya sin nombre
tan perpetuo y tan ausente
como un mirar impronunciable.

Mi memoria descansa y se extiende
tras ese olor a hierba agitada
que invita a descalzarse,
a palpar el humus que amalgama
lo que respira, sangra y suda
lo que llora,
lo que ríe,
hermoso y fragmentado
en las arterias verdes de Chiapas.

Así la curva de tu espalda;
verdes que se concentran y se diluyen
mutando su densidad de selva en bosque;
cascadas que nutren tus dialectos,
y voces tiernas que te buscan
perdidas en la noche invertebrada.

Caminé tus tardes, Chiapas,
para memorizar la respiración de tus tejados,
para volver en ti y habitar tu insomnio,
tu orilla,
tu calma.
Pero pulsas tan lejos, Chiapas,
tan lejos y tan crudo
que eres laberinto incansable,
un paraíso ajeno,
un mural impenetrable.

Te quiero tocar
pero te tapas la cara con las manos,
te tapas las manos con la cara,
pues no eres sólo tierra de paisajes
eres también lengua dislocada,
mestizaje inconcluso,
una melodía que al gritar se apaga,
un ritual que florece y se desangra.

Aunque tu piel es un canto que persiste
más allá de la voz que te exhala,
eres un pedazo de sombra,
un niño que te juega,
una guerrilla en tzotzil,
cien lagunas que se colorean a sí mismas,
y marimbas que arrullan desde lejos,
lejos y verdes,
siempre verdes
Chiapas.






Linda Bucay es estudiante avanzada de la Licenciatura en Psicología de Universidad de las Américas, trabaja coordinando proyectos sociales, educativos y culturales para jóvenes. Escribe sobre adicciones en una organización dedicada a su prevención y tratamiento. Desde que su memoria le permite recordar, le gustaría entender cómo es que pueden existir cosas tan hermosas como la música o la poesía, que descansan sobre otras tan complejas como los seres humanos y la forma en que se relacionan.

martes, 6 de septiembre de 2011

La situación de las mujeres en el México actual: algunos datos fundamentales (parte 2)


Fernanda Hopenhaym


La primera entrega de este artículo analizó el estado de asuntos clave tales como la violencia contra las mujeres, incluyendo los feminicidios, la participación política y la feminización de la pobreza. En esta segunda y última parte nos centraremos en presentar datos acerca de otros tres temas fundamentales para comprender la situación de las mujeres en México actualmente: salud sexual y reproductiva, educación y mercado laboral.


Salud sexual y reproductiva

Algunos datos generales
Tasa de fertilidad nacional: 2.3
Tasa de mortalidad infantil (cada 1000 nacidos vivos): 19
Tasa de mortalidad materna (cada 100,000 nacidos vivos): 60

Interrupción del embarazo
En México, la interrupción del embarazo es legal en determinadas circunstancias. Sin embargo, si una mujer queda encinta y decide interrumpir su embarazo, se ve obligada a practicarse un aborto en la clandestinidad. Algunas pueden acudir a servicios higiénicos y seguros. La mayoría, sin embargo, pone en riesgo su salud y hasta su vida, porque carece de recursos para recibir atención adecuada.

El aborto no se considera delito o no se sanciona, cuando:
-      El embarazo es resultado de una violación
-      El aborto es provicado accidentalmente (o, como dice la ley, de manera “imprudencial” o por “conducta culposa”)
-      El embarazo pone en riesgo la vida de la mujer
-      El producto tiene malformaciones graves
-      De continuar con el embarazo se provocaría un grave daño a la salud de la mujer
-      El embarazo es producto de una inseminación artificial no consentida
-      La mujer vive en situación de pobreza y tiene al menos tres hijos
-      Se realiza dentro de las primeras 12 semanas de gestación

De estas ocho razones sólo la primera (por violación) es válida en todo el territorio nacional. Treinta estados contemplan el aborto imprudencial y veintinueve cuando el embarazo pone en riesgo la vida de la mujer. Así, la constante legislativa en nuestro país es no castigar el aborto por violación, imprudencial y por peligro de muerte de la mujer. El resto de las causas de aborto no punible varía de un estado a otro. Las leyes de aborto de la mayor parte del país datan de los años treinta del siglo XX, y sólo la mitad o una tercera parte han vuelto a revisarse desde entonces. Nuestras leyes se encuentran a la zaga de las del resto del mundo en esta materia, ya que actualmente 61% de la población mundial vive en países donde se permite el aborto por una amplia gama de razones, incluso por la sola voluntad de la mujer.

Actualmente, en México, sólo el Distrito Federal permite la interrupción voluntaria del embarazo sin restricciones hasta las 12 semanas de gestación, tras una decisión histórica de la Asamblea Legislativa, el 24 de abril de 2007. Entre esa fecha y el 6 de julio de 2010 se realizaron en el DF 42,873 interrupciones legales del embarazo (7.4% de las cuales fueron solicitadas por mujeres menores de edad). Por otra parte, 17 Estados han reformado su constitución entre 2008 y 2011 para proteger la vida desde la concepción/fecundación (Baja California, Campeche, Chiapas, Colima, Durango, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Nayarit, Oaxaca, Puebla, Querétaro, Quintana Roo, San Luis Potosí, Sonora, Tamaulipas, Yucatán).

Anticoncepción y anticoncepción de emergencia
Según una investigación del Centro Latinoamericano Salud y Mujer (CELSAM) realizada en 2010, en México 53% de las mujeres en edad fértil no emplea ningún método anticonceptivo. Mayoritariamente esto se debe a falta de información, falta de acceso, o a negativas por parte de su pareja.
Por otra parte, desde el 21 de enero del 2004, la anticoncepción de emergencia está incluida en la Norma Oficial Mexicana de Planificación Familiar. El 11 de julio de 2005 se incluyó en el cuadro básico de medicamentos de la Secretaría de Salud en decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación. Esto significa que la anticoncepción de emergencia debería ser accesible en cualquier centro de salud.

Enfermedades de transmisión sexual (ETS)
Cerca de 30% de los mexicanos entre 18 y 30 años de edad han padecido alguna enfermedad de transmisión sexual. Diariamente son detectados y atendidos, cerca de 15% de pacientes con este diagnóstico. Las enfermedades con mayor número de infectados son la candidiasis, tricomoniasis, vulvovaginitis, sífilis, gonorrea y clamidia, de acuerdo con cifras del Instituto Mexicano de Seguridad Social (IMSS). De las infecciones de transmisión sexual, la que tiene más incidencia es la del Virus del Papiloma Humano (VPH), con una tasa de 23.3 casos por cada 100 mil habitantes en el país. La mayoría de las ETS afecta a hombres y mujeres por igual, pero en muchos casos los problemas de salud que provocan pueden ser más graves en las mujeres, en especial si están embarazadas.

VIH/SIDA
La prevalencia del VIH/SIDA en México, según datos de CENSIDA para 2009, es de 0,38% de la población. Si bien la incidencia es mayor en hombres que en mujeres (que representan 18% de los casos registrados a noviembre 2010 por CENSIDA), si se toman los llamados “grupos de riesgo”, las mujeres heterosexuales conforman el segundo grupo más vulnerable (con una estimación del 22% de los contagios por VIH) después de los hombres que tienen sexo con hombres (60%). Podría decirse entonces, que la incidencia sobre las mujeres en general ha ido en aumento y es muy significativa, lo cual necesitaría acciones focalizadas. 
Actualmente, autoridades de salud estiman una cobertura en el tratamiento con antirretrovirales del 95% de los pacientes con VIH/SIDA que conocen su status serológico.


La educación

En términos de la matrícula en los diversos niveles educativos, en los últimos años ésta se ha prácticamente equiparado entre hombres y mujeres, alcanzando como promedio una tasa de 51% de hombres y 49% de mujeres en la educación básica para 2008 (Datos del INEGI). En la educación media superior esta relación es de 48% de hombres y 52% de mujeres, mientras que en educación superior las cifras son de 49.7% para hombres y 50.3% para las mujeres.

Sin embargo, al avanzar en los niveles de posgrado, la participación de las mujeres disminuye, y si se analiza la composición del personal académico, el porcentaje de mujeres es mucho menor. Por ejemplo, el sistema nacional de investigadores (SNI) cuenta con 13 mil 485 personas dedicadas a la investigación, de éstos 9 mil 202 son hombres (68.2%) y 4 mil 283 son mujeres (31.8 por ciento). De las 6 áreas que conforman el SNI, la que cuenta con una menor diferencia de género es la de Humanidades, donde 48.5% son investigadoras. Por su parte, el área con una brecha mayor es la de Ingeniería, donde solamente 15.8% son investigadoras.

Los progresos en la incorporación de las mujeres al sistema educativo nacional, especialmente en los estudios medios y superiores, han sido paulatinamente favorables; sin embargo la preferencia de la población por ciertos niveles educativos, áreas de conocimiento y carreras aún reflejan estereotipos de género que impiden el acceso equitativo a determinados campos del conocimiento y la investigación.

En términos generales, al observar los niveles educativos en la población en general, siguen existiendo brechas entre hombres y mujeres. Para 2009, la diferencia más significativa se encontraba en los grupos de edad mayores a 45 años, donde la tasa de mujeres sin escolaridad es superior (alcanzan una diferencia porcentual de 7 puntos en el tramo de 75 años y más). En total, si se toman de manera agregada las personas con 15 años y más, 8.4% de mujeres no tienen escolaridad, frente a 6% de hombres en igual situación. 


El mercado laboral

En la última Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) realizada por el INEGI en 2009, se considera no solamente el trabajo remunerado destinado al mercado (conocido tradicionalmente como actividad económica) sino que se incorpora el trabajo no remunerado, principalmente aquel llevado a cabo en los hogares pero también el realizado en las áreas agropecuarias y de bienes y servicios en negocios familiares. De esta manera la incorporación de las mujeres a las cifras sobre ocupación y empleo se ha visto incrementada.

Los datos de la ENOE de 2009 reportan entonces que de los 78.7 millones de personas de 14 y más años, nueve de cada diez trabajan; proporción que equivale a 75.4 millones de personas, de las cuales 40.5 millones son mujeres (53.7%) y 34.9 millones son hombres (46.3%). La mayor presencia de las mujeres en el trabajo es resultado de la hegemonía que tienen en el trabajo no remunerado, además de su creciente inserción en el mercado. Esto muestra un avance en la participación de la mujer en el terreno laboral; avance que no ha sido en condiciones de igualdad, pues generalmente se incorporan en puestos de trabajo de menor jerarquía que los hombres y perciben una menor remuneración (incluso en los mismos puestos de trabajo). Además, las mujeres continúan siendo casi en exclusiva las responsables de las actividades de sus propios hogares, generalmente cubriendo una doble jornada de trabajo, la familiar y la laboral. Esto muestra que no se ha modificado de manera significativa la tradicional división sexual del trabajo imperante en nuestras sociedades. De hecho, para 2009 de los 41.4 millones de mujeres de 14 y más años que habitaban el país, 62.3% realizaron trabajo no remunerado, mientras que de los 37.3 millones de hombres en esas edades, 26.5% desempeñaron dicho trabajo.

Dentro del trabajo no remunerado, las áreas donde las mujeres representan una proporción mucho mayor son los quehaceres domésticos (75.9%) servicios gratuitos a la comunidad (64.5%), y el cuidado de niños, ancianos y enfermos (91.4%). Los hombres por su parte, participan más en tareas como mantenimiento de la vivienda y reparación de los bienes del hogar (82.4%) o autoconstrucción de la vivienda (80.7%).

Si se toma solamente el trabajo remunerado, para 2009 la ENOE reportó que 67% de los hombres realizaba algún tipo de labor remunerada, mientras que solamente 35.5% de las mujeres percibía ingresos por su trabajo.



A modo de cierre, simplemente vale la pena destacar lo que ya salta a la vista en base a los datos presentados: aún persisten importantes desigualdades entre hombres y mujeres en México. De igual modo, permanecen irresueltas algunas cuestiones que tocan particularmente a las mujeres, como la violencia de género y la grave situación respecto de los feminicidios. Los movimientos feministas y de mujeres en nuestro país continúan trabajando en pro de la igualdad y el disfrute pleno de los derechos por parte de las mujeres. Sin embargo, es también responsabilidad del Estado avanzar en estas cuestiones, que deben formar parte fundamental de los proyectos políticos que busquen mejorar la calidad de vida de todas y todos los mexicanos.



Bibliografía y fuentes

-    Centro Nacional para la Prevención y el Control del VIH/SIDA (CENSIDA): http://www.censida.salud.gob.mx/
-    Cacho, Lydia, El Estado de México: Feminicidios Ignorados, enero 2011, en http://www.lydiacacho.net/12-01-2011/el-estado-de-mexico-feminicidios-ignorados/
-    Elige, Red de Jóvenes por los Derechos Sexuales y Reproductivos: http://elige.net/
-    Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) 2006, Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
-    Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE): http://www.gire.org.mx/
-    Instituto Nacional de las Mujeres (INMUJERES): http://www.inmujeres.gob.mx/
-    Monárrez Fragoso, Julia. Feminicidio sexual serial en Ciudad Juárez: 1993-2001, Debate Feminista, año 13, Vol. 25, abril 2002, México.
-     Mujeres y Hombres en México 2010, Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI)/ Instituto Nacional de las Mujeres (INMUJERES).
-     Pobreza y género. Una aproximación a la forma diferencial en que afecta la pobreza a mujeres y hombres en México, 2010, Instituto Nacional de las Mujeres (INMUJERES).


FERNANDA HOPENHAYM es socióloga, egresada de la Maestría en Estudios Latinoamericanos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Investigadora y activista feminista.
Este artículo fue publicado anteriormente por la Fundación Equidad y Progreso: http://www.fundacionequipo.org/